La gestión sostenible de los bosques requiere arreglos jurídicamente vinculantes combinados con recursos financieros para el personal y la recopilación de datos, apoyados con estructuras sólidas para hacer cumplir las medidas jurídicas más allá de la duración de un solo ciclo político. En este sentido, las instituciones relacionadas con los bosques con mandatos claros pueden facilitar la tarea de garantizar la sostenibilidad de un Sistema Nacional de Monitoreo Forestal (SNMF), aumentar la transparencia de los datos forestales, el acceso a los recursos financieros, incluidos los pagos basados en resultados de REDD+, e informar adecuadamente los procesos de toma de decisiones para reducir la deforestación y la degradación.